Intoxicaciones, axfisia, cortes, heridas, quemaduras o estrangulamiento son los peligros más frecuentes de algunos juguetes no indicados para niños Array Imprimir Array

Hay que prestar atención al diseño, la fabricación y la correcta utilización de los objetos con los que se divierten y forman los más pequeños.

Los juguetes más demandados son sin duda los más publicitados, aunque la Unión de Consumidores de Málaga recuerda que no siempre son los mejores y que tampoco debemos dejarnos engañar y precipitarnos por comprar ese artículo por miedo a que se agote ya que hay suficiente cantidad que no ha salido a la venta debido a la crisis.

En este sentido, la Unión de Consumidores de Málaga aconseja esperar a las buenas ofertas y no precipitarse. Además, este año están cambiando las tendencias y el consumidor está apostando por recuperar juegos tradicionales, sobre todo juegos de mesa para compartir en familia.

ATENCIÓN AL ETIQUETADO

Se estima que cada niño malagueño recibirá de media entre 180 y 200 euros en juguetes y regalos, la mayoría, debido a la crisis, se comprarán en establecimientos no especializados en busca de bajos precios, hay que tener cuidado porque en muchos casos estos juguetes no reúnen los requisitos de homologación y seguridad europeos, no basta con comprobar que aparezcan las siglas CE (ya que en la mayoría de los casos no es real) también hay que buscar su composición en el etiquetado en castellano debidamente explicado: las sustancias químicas de su composición, metales pesados, la estructura de pequeños fragmentes que pueden ser mordidos o tragados, etc.

El consumidor debe atender también a la edad del niño al que va dirigido el juguete, normalmente los fabricantes lo indican en la caja, si no es así solicite ayuda al vendedor para buscar los más indicados. Cuidado con el tamaño de las piezas, el peso de las mismas, botones, cuerdas o incluso muñecos con pelusa. Los peligros más frecuentes son:

  • Las intoxicaciones (es la más frecuente por la pintura de algunos juguetes que tienen plomo)
  • La asfixia (por aspiración o atragantamiento de componentes pequeños)
  • Los cortes y heridas (debidos a terminaciones afiladas o puntiagudas)
  • Las quemaduras (a causa de materiales inflamables)
  • El estrangulamiento (provocado por la existencia de cuerdas y cordones).