Como cada año, para una celebración de Halloween sin problemas ni complicaciones el próximo jueves 31, desde la Unión de Consumidores de Málaga deseamos recomendar algunos consejos básicos sobre disfraces y maquillajes, así como para los que decidan asistir a fiestas temáticas en esta festividad.
Hay que ser precavido en la compra de los disfraces, máscaras y demás complementos, principalmente para los más pequeños. Queremos lanzar la advertencia de la importancia de adquirir productos de calidad, así como solicitar a los organismos competentes un mayor número de inspecciones y controles en establecimientos que puedan vender artículos que incurran en irregularidades.
Cada vez es más frecuente que los niños se disfracen en Halloween, tanto para pedir caramelos por las casas como para fiestas organizadas por los propios colegios. Por ello, hay que prestar atención a detalles como que los disfraces no lleven cordones en la zona del cuello – sistema prohibido en la ropa para niños pequeños por el riesgo de asfixia – o a que cumplan los requisitos relativos a inflamabilidad, para eliminar el riesgo de quemaduras.
En este sentido hay que recordar que los disfraces para menores de 14 años se consideran juguetes y, entre otras cuestiones, deben tener la marca CE que garantice que los tejidos tienen una combustión lenta o advertir la existencia de piezas pequeñas o peligrosas.
Desde la Unión de Consumidores de Málaga recomendamos que, ante la variedad de precios y calidades existentes, se compare y elija un producto observando la relación calidad-precio y, sobre todo, que garantice la normativa mínima de seguridad descartando y denunciando posibles irregularidades al respecto.
Consejos relativos a disfraces y maquillajes:
- En el etiquetado de los disfraces para niños debe aparecer el distintivo CE, además de la edad recomendada para su uso (especialmente si son para menos de 3 años), las advertencias de utilización y los datos identificativos de fabricante y/o responsable del producto. Además, este etiquetado deberá estar en español.
- Los disfraces siempre deben cumplir el etiquetado de las prendas textiles, indicando nombre, dirección y el NIF del fabricante, comerciante o importador, número de registro industrial en el caso de prendas fabricadas en España y composición del producto.
- Los complementos, sobre todo en el caso de las máscaras, deberán disponer de orificios suficientemente grandes para que permitan la perfecta ventilación. Las pelucas no deberán contener materiales inflamables. El nailon o el poliéster son los mejores materiales por su resistencia al fuego.
- Hay que evitar la compra de productos punzantes, como tridentes, cuchillos o lanzas.
- Se debe extremar la precaución en la compra de maquillajes, ya que aquellos que no estén dermatológicamente testados pueden provocar severas alergias. Normalmente, su etiquetado no suele reflejar la composición y, en muchos casos, estas pinturas pueden contener plomo, una sustancia perjudicial para la piel y la salud.
En esta fiesta cada año más extendida, también hay que extremar la precaución en la ingesta de dulces y golosinas, especialmente con los más pequeños para evitar atragantamientos. Siempre es recomendable que un adulto acompañe a los niños mientras piden caramelos por las casas.
Consejos sobre fiestas temáticas:
- Confirmar previamente que el local donde la fiesta tendrá lugar cuenta con los permisos oportunos y las licencias administrativas necesarias para su celebración.
- Guardar siempre la entrada y la publicidad, ya que ambas tienen valor contractual.
- Controlar la seguridad del local, principalmente en lo referido a instalaciones – salidas de emergencia, extintores, etc.
- Denunciar si se observa un comportamiento inadecuado de los vigilantes, ya que su actividad está regulada.
- Es obligatorio para todos los establecimientos disponer de las hojas de reclamaciones. Ante cualquier incidencia, el consumidor puede solicitarla para hacer valer sus derechos. Si el organizador se niega, debe solicitarse la presencia de la Policía Local.
- Es preceptivo que los organizadores cuenten con un seguro de responsabilidad civil para los daños accidentales (resbalones, caídas...)